Con motivo del Día de la Cruz, que se celebra cada 3 de mayo, la experta en diseño floral Ana María de Martínez fue invitada a la sección “Desayunando con…” del programa Viva la Mañana, donde enseñó paso a paso cómo decorar la cruz que forma parte de las tradiciones en El Salvador.
Ana María, quien cuenta con más de 20 años de experiencia embelleciendo cruces para iglesias y hogares, mostró cómo transformar una cruz tradicional en una obra llena de color y vida, sin perder su esencia espiritual.
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Durante su intervención, explicó cómo cortar y moldear papel de china en formas florales, utilizando colores vivos como el fucsia, anaranjado, amarillo, azul, entre otros. “Es importante que la cruz transmita alegría, porque con ella damos la bienvenida al invierno y agradecemos por los frutos que la tierra nos da”, expresó.
Elementos que no deben faltar
La diseñadora explicó que la cruz debe elaborarse con palo de jiote, una madera tradicional por su resistencia y simbolismo. Esta debe colocarse sobre una base firme y decorarse con tres elementos esenciales: papel de china en colores vivos, una matata y frutas de temporada.
“La matata es uno de los elementos más importantes. Es un símbolo de conexión con la tierra y sirve como base para colocar las frutas”, detalló Ana María. Entre las frutas que no deben faltar están los collolitos, mangos, sandía, melón, papaya, jocotes y otras del tiempo que simbolizan la abundancia, la fertilidad y el inicio del invierno.
Las presentadoras, Larissa y Ale, también compartieron sus recuerdos escolares en torno a esta celebración. Recordaron cómo, en el colegio, cada alumno llevaba una fruta específica para decorar la cruz, y al final del acto, podían elegir una para llevársela a casa.
Historia tomada de @artedecorativosv
El motivo de la celebración
El Día de la Cruz se celebra cada 3 de mayo en muchos hogares salvadoreños como una fecha especial de agradecimiento, fe y tradición. Tiene sus raíces en una mezcla de herencia cristiana y elementos indígenas.
La tradición proviene de la devoción al hallazgo de la Santa Cruz por Santa Elena en el siglo IV, pero en El Salvador se ha mezclado con costumbres agrícolas precolombinas, convirtiéndose en una celebración que da la bienvenida al invierno y al inicio de la cosecha.