El túnel número 2 de la carretera El Litoral, en La Libertad, recorre 577 metros de penumbra y soledad y guarda un misterio que muchos dicen haber presenciado, aunque nadie logra explicarlo. Según varios camioneros que circulan por la zona, una mujer vestida de blanco aparece de pronto y se sube a los vehículos… sin que nadie pueda evitarlo.
«Saliendo de aquí del túnel encontraron a la mujer caminando. Ellos se preguntaron, ¿cómo una mujer va a andar caminando a esta hora de la noche? Se sube en el asiento del copiloto y ellos contaban ahí y yo les decía «¿no les daba miedo?». «No, no me da miedo, hasta platicaba y de repente, ya no estaba». Solamente uno que es camionero y que anda en la calle se da cuenta de lo que uno vive, de lo que uno ve», comentó Walter Marroquín al narrar la experiencia de sus compañeros.
Video / TCS. / Reportaje elaborado por: Maziel Méndez.
La acompañante sin rostro: un relato lleno de misterio
Quienes afirman haberla visto coinciden en lo mismo: no se le ve el rostro, solo una silueta vestida de blanco con el cabello largo cubriéndole la cara. Lo más aterrador, dicen, es que aparece inesperadamente… y de pronto está sentada a su lado.
«Era como la 1 de la madrugada cuando yo pasé ahí por el túnel y, de repente, voy viendo aquella sombra que era como una mujer que estaba parada ahí. Yo frené en seco, no le alcancé a pegar porque no se sintió nada. Al ratito sentí que «zamaquearon» el camión y cuando volteo a ver voy viendo una mujer de cabello largo, pero no se le miraba la cara», relató un testigo.
Ella permanece en silencio, sentada inmóvil hasta que el vehículo atraviesa todo el túnel. Algunos conductores aseguran que colocar objetos en el asiento del copiloto evita que esta extraña pasajera se suba. Por eso, hacen lo posible por mantener ese lugar siempre ocupado.
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¿El origen del mito en la carretera El Litoral?
Los vecinos de la zona aseguran que la historia comenzó tras un fatal accidente ocurrido hace más de diez años. También mencionan una antigua pila de agua cercana al túnel, un lugar que muchos aún visitan donde, según cuentan, la mujer fue a buscar agua y nunca regresó.
Para los conductores, este tramo de la carretera El Litoral dejó de ser solo una parte más de su ruta laboral. Se ha transformado en un lugar donde lo inexplicable acecha, donde el silencio y la oscuridad no solo envuelven el camino, sino que también despiertan un miedo profundo.
En lo más oscuro del túnel, el goteo constante del agua que resbala por sus paredes parece contar un secreto: la presencia de una mujer que cruzó sus sombras y jamás regresó.