En un rincón de su hogar, David Ayala derrite cera, mezcla colores y moldea figuras que engañan a simple vista. A primera impresión, parecen postres recién salidos del horno, bebidas listas para servirse o arreglos florales para regalar. Pero en realidad, son velas artesanales, diseñadas y elaboradas a mano por este joven salvadoreño que ha encontrado en la cera una forma de expresión, emprendimiento y conexión familiar.
David se inspiró en la necesidad de generar ingresos extra. “La idea nace con la necesidad de querer generar ingresos extras y hacer un detalle que sea significativo, que provoque emociones y sensaciones bonitas, algo fuera de lo común, llamativo. En ese caso, las velas son un regalo especial y funciona para cualquier tipo de ocasión”, afirma.
Video/TCS/ Reportaje elaborado por Santiago Hernández
Las piezas que realiza requieren de un proceso cuidadoso. Primero, derrite la cera a temperaturas controladas; luego, aplica colorantes y aromas según el diseño; finalmente, vierte la mezcla en moldes que ha seleccionado o creado previamente. Cada vela tarda en promedio unos 30 minutos, aunque el tiempo varía según la forma y el nivel de detalle.
Una de las características más llamativas de su trabajo es el realismo. Para lograrlo, David se ha apoyado en herramientas digitales y en la inteligencia artificial, que le permite mejorar sus mezclas de colores y visualizar nuevos diseños antes de materializarlos. “Me he apoyado de la inteligencia artificial. Hoy por hoy se usa bastante, me ha ayudado mucho en el caso de los colores. Antes era difícil hacer uno como el café, pero ahora con IA se me facilita más”, comparte.
El impacto de su creatividad no solo se ha quedado en sus manos. Su familia también se ha involucrado en la elaboración de estas piezas. “Para mí es un tesoro, esto es increíble. Cada diseño que hacen es una inspiración. Él ve una cosa y ya quiere hacerla en vela. Su creatividad lo mueve. Muchas veces me dice: ‘Mami, he pensado hacer esto’, y yo le digo: ‘Vaya hijo, está bien, primero Dios te va a quedar bonito», asegura su madre.