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jueves, 07 noviembre, 2024

¡Campana de la victoria! Testimonios de mujeres que vencieron el cáncer

Se hicieron sonar los primeros campanazos de dos mujeres que finalizaron su última quimioterapia contra el cáncer.

«La campana de la victoria» es una tradición en algunos hospitales oncológicos del mundo que data de 1996, cuando el almirante estadounidense, Irve Le Moyne, regaló la campana de bronce de su barco al centro médico Anderson de Houston, Texas. Así fue como el militar agradeció a los médicos el esfuerzo con el que trataron el cáncer que padecía en el cuello y cabeza.

En nuestro país, dos mujeres luchadoras, Kathy y Brenda, quienes por un largo tiempo tuvieron que pasar por un proceso desgastante para cerrar un capítulo de coraje, fuerza y esperanza al finalizar el tratamiento de quimioterapia.

Video/TCS. Reportaje elaborado por Fabiola Hernández.

La iniciativa denominada «Mi Tiempo de Renacer», por parte de la fundación Liga Contra el Cáncer, tienen como objetivo brindar un servicio para personas que han sido diagnosticadas con cáncer.

Una vez que se determina que el paciente califica para los servicios, reciben el tratamiento con el objetivo de que puedan vencer el cáncer.

La institución cuenta con el apoyo de empresarios de gran espíritu, altruistas y sensibles ante la dolencia del cáncer, así como con la colaboración del sector público, clubes de servicio y gremios profesionales.

Video/TCS

Supervivencia al cáncer

Hay millones de adultos y niños en el mundo que son sobrevivientes de cáncer. Se considera que una persona es sobreviviente de esta patología a partir del momento del diagnóstico y durante el resto de su vida. Por eso, ser sobreviviente tendrá un significado distinto para cada persona a lo largo del tiempo. 

Muchas personas dicen que, aunque se sintieron aliviadas cuando terminaron el tratamiento, fue difícil hacer la transición a un nuevo modo de vivir. Fue como entrar en otro mundo donde se tuvieron que adaptar a sentimientos nuevos, problemas nuevos, cambios en la ayuda que recibían y a una forma diferente de ver el mundo.

A veces, afrontar el cáncer se convierte en una forma de vida. Continuarán los controles de vigilancia. Para algunas personas, los problemas físicos o emocionales perduran por años.

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