El gobierno del presidente de Luis Abinader implementa 15 medidas para frenar la migración irregular, entre ellas las inmigrantes embarazadas.
Una de estas medidas está relacionada a la salud pública y control hospitalario, ya que el Servicio Nacional de Salud (SNS) cuenta con un nuevo protocolo que exige requisitos para la atención médica, tales como: identificación, carta de trabajo y prueba de domicilio.
Las mujeres inmigrantes embarazadas no son la excepción. Haitianas y venezolanas que ingresan a los hospitales públicos para dar a luz, fueron reportadas a las autoridades migratorias dominicanas para luego iniciar con su proceso de deportación.
Los 33 hospitales de la red pública han acatado las órdenes giradas por el Ejecutivo y desde el 21 de abril se han llevado a cabo redadas para ubicar a mujeres embarazadas. El director del SNS, Mario Lima, dijo que en dichos centros médicos se registra hasta el 80% de los partos de madres extranjeras que buscan atención en hospitales.
Inmigrantes embarazadas bajo incertidumbre
Las mujeres inmigrantes embarazadas buscan por sus propios medios los insumos para ser atendidas. Ese fue el caso de Manitha Jean Louis, quien desde hace nueve años vive en República Dominicana y hace unos días dio a luz a una niña.
“Yo no tengo familia allá (Haití), yo no tengo a nadie allá. Yo no sé a dónde me voy”, dijo a un equipo de prensa de DW Español.
Manitha y su bebé fueron deportadas luego de recibir el alta. Sus otros dos hijos quedaron en Dominicana bajo el cuidado de una vecina.
Por su parte, Moliena Jean, otra mujer haitiana, dejó de asistir a sus consultas por temor a una deportación pese a tener ocho meses de embarazo. “Cada vez que anuncian que habrá un operativo de migración, se me sube la presión porque me siento preocupada. Tengo ocho meses de embarazo y siento temor porque no sé qué voy a hacer. Fui a una clínica y me piden 45 mil pesos por el parto (más de $760)”.
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Gobierno asegura que respeta derechos de inmigrantes
A través de un comunicado, el gobierno dominicano aseguró que “estas repatriaciones de madres indocumentadas se llevan a cabo según un protocolo con las autoridades del Seguro Nacional de Salud. Tras completar el examen médico, reciben el alta hospitalaria y se confirma que no presentan ningún riesgo para la salud. A continuación se inicia el proceso de inmigración, garantizando el cumplimiento de las disposiciones legales nacionales e internacionales aplicables a todas las personas que residen en el país”.
“La supervisión directa es esencial para garantizar que los protocolos se cumplan con el debido respeto a los derechos humanos, en el marco de una política migratoria firme pero justa”, aseguró el director general de Migración y Extranjería, Vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester.
Por su parte, el presidente del Colegio Médico de República Dominicana, doctor Waldo Ariel Suero calificó de rígida la aplicación de esas medidas que podrían traer consecuencias negativas a la salud de los inmigrantes.
“¿Qué es lo que está pasando? Que por temor a que sean deportados estos enfermos indocumentados adultos y niños, se están quedando en sus casas y al no asistir al médico a recibir el tratamiento clínico o quirúrgico, terminarán empeorando su salud en sus hogares”, dijo el doctor Ariel Suero.
“Para nosotros los médicos priorizar la salud es lo fundamental, el médico en el marco de su formación profesional es humanista y nos enseñaron a salvar vidas, es nuestra labor prioritaria. El humanismo está por encima de todo, incluyendo la política”, aseveró el galeno.
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Aumenta cifra de deportaciones de haitianos
En lo que va del año más de 119,000 haitianos ya fueron deportados a su país de origen, lo que representa un incremento del 71% en comparación al mismo período del año pasado.
“La Dirección General de Migración repatrió en el mes de abril 32,540 ciudadanos haitianos en condición migratoria irregular en el país, para completar la cifra de 119,003 en el cuatrimestre enero-abril del 2025. La cifra representa un aumento del 71% en comparación con mismo período del año anterior”, según un comunicado emitido por las autoridades.
Según estimaciones, más de 800,000 haitianos viven en República Dominicana, aunque el número podría alcanzar el millón.
