El Día del Niño dejó una sorpresa distinta en Liberadas. Luciana Sandoval, siempre dispuesta a sumarse a las dinámicas del programa, se convirtió por unos minutos en aprendiz de magia gracias al Mago Ben, quien llegó al set acompañado de un par de cubos Rubik.
La prueba parecía sencilla: Luciana debía tomar uno de los cubos, mezclarlo con las manos detrás de su espalda y, mientras conversaba con el mago, girarlo sin detenerse. “Quiero ser mago, quiero ser mago”, repetía entre risas mientras seguía las instrucciones.
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Al mismo tiempo, el Mago Ben le pedía asociar cada color con lo primero que viniera a su mente. Luciana dijo que el blanco con el cielo, azul con el mar, verde con las plantas, amarillo con un vestido, rojo con la pasión. La dinámica, explicó el experto en magia, buscaba que el cerebro enviara esa información al cubo.
Cuando Luciana mostró el resultado, el asombro fue para todos en el set: cada cara del cubo estaba perfectamente ordenada por color. “¿Cómo es esto posible?”, expresó, aún incrédula, mientras Ana Pao Sifuentes le pedía que revelara el truco.
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El mago explicó que se trataba de un ejercicio para demostrar “que el cerebro es la máquina más poderosa y que en la imaginación está todo lo increíble”. Luciana, todavía sorprendida, pidió tomarse una foto con el cubo resuelto y con el invitado especial para recordarlo.
