Una visita inesperada, pero muy agradable para el corazón, varios caninos entrenados llegaron hasta el lugar de ancianos en Santa Ana para brindar compañía y despertar emociones. Una acción que demostró que con amor y adiestramiento estas mascotas se pueden convertir en aliados para generar bienestar emocional en los adultos mayores.
En el asilo Narcisa Castilla, en Santa Ana, diez perros fueron los encargados de visitar a los adultos mayores. Los caninos son especiales por el hecho de que se han entrenado previamente para convivir de forma segura con las personas, sin importar la edad y condición.
El director de la Escuela Canina Moderna, Alberto Lima explica que en este proceso de entrenamiento se ha logrado formar a tres tipos de perros: los primeros se han especializado en soporte emocional, otros en terapia asistida y existen otros que tienen la especialización en servicios específicos.
Te podría interesar: Las mascotas: un apoyo clave para el bienestar emocional
Para que los perros logren esa formación, sus entrenadores tardan entre los 12 o 18 meses. “Es un entreno minucioso en el que se les ayude a ser sociables con los demás”, agrega Lima.
Caninos entrenados una opción de terapia emocional
La experiencia canina en el asilo fue gratificante y amena, los adultos mayores tuvieron la oportunidad de acariciar inclusive conversar con ellos, pero todos consideran que este encuentro trajo consigo emociones y recuerdos de antiguas mascotas que en algún momento compartieron en su juventud o infancia.
Esta visita es considerada como terapéutica porque ayuda a la salud mental y emocional de las personas, encuentros que minimizan, además, situaciones de ansiedad.
Cristóbal Guerra es adiestrador y señala que al entrenar el perro se logra que este se mantenga sano y su estabilidad puede generar mejor conexión con las personas.
Video /TCS/Sofía Shi.
