Britney Spears volvió a generar conversación mundial tras confesar que padece “daño cerebral”, una afirmación que hizo pública a través de sus redes sociales mientras reaccionaba a los señalamientos de su exesposo, Kevin Federline, en sus memorias «You Thought You Knew», aún sin publicar.
En su mensaje, la artista explicó que el daño se originó a raíz de un periodo de confinamiento que describió como profundamente traumático. “Durante cuatro meses ya no tuve mi puerta privada y se me obligó, de forma ilegal, a no usar mis pies ni mi cuerpo para ir a ningún lugar”, escribió, aludiendo a los episodios que también relató en su autobiografía «The Woman in Me«.
Spears detalló que durante ese tiempo perdió movilidad y conexión con su cuerpo: “Me quitaron las alas y me ocurrió daño cerebral hace tiempo, cien por ciento”. Además, explicó que el baile fue clave para su recuperación: “Sé que mis publicaciones bailando pueden parecer ridículas, pero me ayudaron a recordar cómo volar”.
Britney Spears responde a su exesposo Federline
Su publicación fue también una respuesta directa a los extractos del libro de Federline filtrados a los medios, en los que él la acusa de comportamientos peligrosos hacia sus hijos, entre ellos un supuesto incidente en el que habría sostenido un cuchillo mientras los observaba dormir. La cantante negó categóricamente esas versiones y cuestionó la motivación de su expareja: “Si realmente amas a alguien, no lo ayudas humillándolo”.
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La intérprete de “Toxic” reiteró que siempre ha intentado mantener una relación cercana con sus hijos y lamentó que ellos crecieran expuestos a disputas familiares. “Las relaciones con adolescentes son complejas, pero siempre he suplicado tener una vida alrededor de mis hijos”, expresó.
Con este mensaje, Britney pone nuevamente en evidencia las secuelas personales de los años de tutela y la tensión constante con Federline, quien fue su esposo entre 2004 y 2007.
