La Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en una herramienta cotidiana para buscar información en internet, responder mensajes o generar imágenes en cuestión de segundos. Sin embargo, detrás de cada acción existe un alto costo ambiental que preocupa.
Según un estudio tecnológico, ChatGPT recibe alrededor de 2,500 millones de consultas diarias. Si la demanda continúa creciendo al ritmo actual, para 2028 esta tecnología podría consumir tanta electricidad como el 22 % de todos los hogares de Estados Unidos.
Al respecto, el especialista en tecnología, Victor Cuchillac explica que la alta demanda ocasionará que se necesite más energía y esto obligará a buscar nuevas alternativas para producirla, pero finalmente al buscar “opciones para generarla el problema que se advierte es el impacto ambiental”.
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El uso excesivo de la Inteligencia Artificial podría afectar la capa de ozono
Asimismo, los expertos en temas ambientales alertan que el crecimiento acelerado de la IA no solo incrementa la presión sobre las redes eléctricas, sino que también podría aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero.
«La generación eléctrica en el mundo tiene una matriz que está fundamentada en combustibles fósiles una buena parte y, obviamente, estamos generando energía que genera un calentamiento global y un cambio climático», asegura el ambientalista de la Unidad Ecológica Salvadoreña (UNES), Luis González.
El uso de este recurso digital genera calor en los equipos, por lo que es necesario un sistema de enfriamiento, generalmente mediante agua. Es en este punto donde se evidencia su impacto ambiental. Además, el empleo de ciertos gases contribuye al deterioro de la capa de ozono, agrega Cuchillac.
Ante esta realidad, los especialistas señalan que se necesitan regulaciones en el uso de estas herramientas con el fin de garantizar que la revolución digital no se convierta en una amenaza climática.
Video/TCS.
Uso de ChatGPT tiene un costo hídrico
Según una investigación de la Universidad de California, en Estados Unidos, cada consulta utilizando herramientas de IA también tiene un costo hídrico. Por ejemplo, generar un texto de 100 palabras en ChatGPT consume en promedio 519 mililitros de agua, equivalente a casi una botella.









