En el departamento de La Paz hay un tubérculo que sostiene sueños, llena mesas y alimenta familias se trata de la yuca, un cultivo que se cosecha en esa tierra fértil y que sirve a las familias que trabajan para su producción.
La yuca no solo crece bajo el sol intenso y la tierra húmeda de la zona, en el distrito de Mercedes La Ceiba, se cultiva con manos llenas de experiencia y con corazones que han aprendido a valorar cada cosecha, ya que se ha vuelto el principal ingreso y sustento de la comunidad.
Eduardo Rodas es uno de los agricultores y explica que son 20 años de trabajar la tierra una tradición que se ha pasado de generaciones en su familia. “Empecé como ayudante con ellos y luego, pues, con el tiempo me independicé y aprendí la receta y ahora, pues, ya tengo mis cultivos propios», añade.
La yuca una raíz que sirve para elaborar muchos platillos típicos
El proceso no termina en el campo. Una vez cosechada, la yuca también se transforma en comida, tradición y comercio. Los derivados de este tubérculo tienen alta demanda local y son parte esencial de la gastronomía salvadoreña. Los famosos nuégados en miel es uno de los platillos que más llaman la atención. Pero se vende también, la yuca salcochada con chicharrones y pepesca.
Te podría interesar: El lago de Coatepeque deja atrás su color turquesa
Además de su valor alimenticio, la yuca tiene una ventaja clave: es resistente a sequías, rinde bastante y no requiere tantos químicos para crecer. Esto la convierte en una opción accesible y sostenible para pequeños agricultores.
El próximo 19 de julio se celebrará por primera vez la feria de la yuca. Un evento que recogerá personajes mitológicos salvadoreños, los cuales se podrán observar durante el recorrido de la caminata verde.
Video/TCS/Reportaje Elaborado por: Sofía Shi.
Cada raíz que se arranca del suelo representa la fuerza de una comunidad que ha aprendido a sacar provecho de la naturaleza con esfuerzo y orgullo.









