El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consolidó este martes un triunfo clave en el Senado, al conseguir el respaldo necesario para su proyecto de ley «grande y hermoso» como lo llama el mismo jefe de estado. Este plan de gastos es el eje central de su propuesta económica para su segundo mandato. Tras un empate 50-50 entre los senadores, el vicepresidente J.D. Vance inclinó la balanza a favor del gobierno, ejerciendo su voto decisivo, tal como lo contempla la Constitución.
Aunque los republicanos cuentan con 53 escaños en el Senado, tres senadores del oficialismo se desmarcaron y votaron en contra, evidenciando las fuertes tensiones internas que provoca la iniciativa.
Los tres republicanos que se opusieron a la iniciativa fueron los senadores Thom Tillis de Carolina del Norte, Susan Collins de Maine y el senador Rand Paul de Kentucky.
Trump, por su parte, ha calificado el presupuesto de 940 páginas como «el grande y hermoso proyecto de ley», aunque ahora el documento deberá enfrentar el análisis de la Cámara de Representantes, donde se anticipa un rechazo absoluto del bloque demócrata y objeciones de varios republicanos preocupados por sus implicaciones económicas y sociales.
El mandatario presiona para que la Cámara de Representantes apruebe la legislación y así firmarla antes del 4 de julio, feriados por el Día de la Independencia.
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¿Qué implica el proyecto de ley de gastos?
El proyecto reúne varias de las principales prioridades republicanas, como recortes fiscales, reducción del gasto público y un aumento en los fondos destinados a defensa nacional y deportaciones, temas clave en la agenda del partido en el poder.
La iniciativa amplía recortes fiscales por 4.5 billones de dólares que Trump impulsó en su primer mandato, elimina impuestos sobre propinas, horas extra y aportes a la seguridad social, y destina más fondos a defensa y control migratorio. A cambio, reduce de forma drástica el presupuesto de programas sociales clave, como Medicaid (programa público de seguro médico), el SNAP (ayuda alimentaria) y los incentivos fiscales para energías renovables que surgieron bajo el gobierno de Joe Biden.
No obstante, según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), el plan añadiría más de 3 billones de dólares a la deuda nacional para el año 2034.
Remesas en juego: qué cambios propone el plan de Trump
El Senado también redujo la tasa al impuesto sobre remesas, del 3.5 % al 1 %, según el último borrador del proyecto de ley.
El portal Político señala que todavía no existe una estimación oficial del costo de esta nueva versión. Sin embargo, se calcula que el impuesto original del 3.5 %, propuesto por los republicanos en la Cámara de Representantes, podría haber recaudado alrededor de mil millones de dólares. En cambio, el porcentaje que aprobó el Senado generaría solo 26 millones de dólares.
