A simple vista, el hogar de Nathaly Méndez y su esposo refleja una vida compartida con gatos: juguetes, camas, rascadores y rincones llenos de maullidos y ternura.
Ambos han creado un espacio donde sus seis felinos —Raina, Pepito, Charlotte, Donatelo, Smoky y Toulouse— viven cómodos y felices, rodeados de atención y cariño.
«Desde chiquita siempre he tenido mascotas felinas, mi primera mascota fue un gatito que me llegaron a regalar a la casa. Entonces, desde que tuve mi primer gato yo sentí la conexión y dije: «yo soy una señora de gatos, yo voy a tener gatos toda mi vida». Conforme fue pasando el tiempo dije yo: «necesito tener así como estos gatos de revista». Fue que vino mi primer gatito a casa, fue Smoky, un grisito y, desde ahí, pues no pude parar», aseguró Méndez.
Video / TCS. / Reportaje elaborado por: Sofía Shi.
Maine Coon: una de las razas de gatos más grandes del mundo
Entre sus mascotas, Nathaly tiene un gato de raza Maine Coon, una especie que destaca por mucho más que su imponente apariencia. Reconocidos como una de las razas felinas más grandes del mundo, estos gatos pueden medir hasta un metro de largo y requieren cuidados especiales para conservar su salud y su exuberante pelaje.
Su dieta, el cuidado de su pelaje y su bienestar general requieren constancia y esmero. A cambio, estos gatos conquistan a todos con su carácter amable y juguetón, lo que los convierte en excelentes compañeros para cualquier hogar.
«El temperamento de Toulouse es bastante activo, es un gatito que sí necesita tener actividad física, por eso es que solemos sacarlo a pasear para que él pueda andar caminando y explorando. No es un gato para nada tímido, él ve a las personas, sale a encontrarlas, le gusta andar paseando. Hace poco fuimos a un evento de disfraces y él ni siquiera hizo mala cara, por así decirlo, cuando vio a los perritos, sino que él es un animalito más», dijo Méndez.
Te podría interesar: «Comedog», el lugar donde los perros sin hogar encuentran alimento y cariño
Los otros miembros de esta familia felina
Pero Toulouse no es el único integrante de la familia felina. Nathaly y su esposo también conviven con gatos persas de la variedad «de show», una línea más selecta y delicada que la del persa tradicional.
Su largo y sedoso pelaje demanda cepillados diarios y atenciones especiales para conservar el aspecto elegante que los caracteriza.
«A ellos es de estar limpiando los ojitos porque se les manchan y también cepillarlos a diario y la alimentación por su tamaño demandan más proteínas, entonces igual mezclarles siempre con alimento húmedo», comentó Alex Paniagua, esposo de Nathaly.
En esta casa, los gatos marcan el ritmo de la vida cotidiana, y cada movimiento felino deja su huella de cariño. Una historia que demuestra que la ternura puede caminar sobre cuatro patas y llenar el hogar de alegría.









