Ucrania y Rusia se acusaron este miércoles de querer hundir el acuerdo anunciado el pasado martes por Estados Unidos. Este debe concluir, bajo condiciones, en una tregua en el mar Negro y en los ataques a las infraestructuras energéticas.
Tras las negociaciones de Estados Unidos con Rusia y Ucrania, celebradas por separado entre el domingo y el martes en Arabia Saudita, se anunció un acuerdo para una próxima tregua. Además anunciaron la reactivación de un pacto para reestablecer la navegación comercial en el Mar Negro.
Sin embargo, Moscú fijó condiciones drásticas para su entrada en vigor. Entre las medidas está el levantamiento de varias sanciones contra Rusia, adoptadas ante su invasión a Ucrania.
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Moscú sostiene que no ha golpeado este tipo de emplazamientos ucranianos desde el 18 de marzo. Por su parte, Ucrania señaló que es falso, aunque no ha publicado la lista de instalaciones golpeadas.
En cuanto al mar Negro, el Kremlin indicó que está en contacto con Washington para aplicar el acuerdo del pasado martes. También Rusia reclama que se levanten sanciones bancarias de Occidente, que en realidad bloquean las exportaciones rusas de cereales y fertilizantes.
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Rusia acusó a Ucrania de haber lanzado ataques contra sus instalaciones energéticas, algo que Kiev niega. El gobierno ucraniano denunció nuevos ataques nocturnos rusos con más de un centenar de drones explosivos.
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