La mortalidad neonatal, definida como el fallecimiento de un recién nacido durante los primeros 28 días de vida, sigue siendo un desafío global de salud pública. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año aproximadamente 2.4 millones de bebés mueren en su primer mes de vida, muchas veces por causas prevenibles.
Para reducir estas cifras, los expertos enfatizan la importancia de los cuidados prenatales durante el parto y posnatales. La ginecóloga Aleyda Marroquín explicó que un chequeo completo durante el embarazo es crucial para detectar posibles complicaciones.
Video/ TCS/ Reporte por Leslie Solito.
«Se realizan exámenes de seguimiento, como los de vías urinarias y se enfatiza en la higiene dental, ya que las infecciones bucales pueden asociarse con partos prematuros», señaló la especialista. Por lo que medidas como estas sirven para identificar y tratar a tiempo cualquier factor que pueda afectar la salud del bebé.
Recomendaciones para prevenir la mortalidad neonatal
Expertos en salud recomiendan lo siguiente:
- Asistir a controles prenatales: Permite detectar y tratar complicaciones a tiempo.
- Vacunarse contra enfermedades: Protege tanto a la madre como al bebé de infecciones prevenibles.
- Mantener una alimentación balanceada: Asegura los nutrientes necesarios para el desarrollo del bebé.
- Evitar el consumo de sustancias perjudiciales: Reduce el riesgo de complicaciones durante el embarazo.
- Identificar y tratar infecciones: Previene complicaciones como partos prematuros.
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La prevención de la mortalidad neonatal requiere un enfoque integral que combine educación, acceso a servicios de salud de calidad y políticas públicas que prioricen la salud materno-infantil. Con estos esfuerzos, es posible salvar miles de vidas cada año y garantizar un comienzo saludable para los más vulnerables.
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