En El Salvador se prepara una sopa auténtica y poco común, cuyo ingrediente principal son las criadillas de toro. Para muchos, este platillo tradicional devuelve la fuerza, levanta el ánimo y hasta el orgullo.
¿Cómo es posible? La respuesta está en la mezcla de tradición, creencias y sabor que da vida a esta receta singular, explica Otoniel Mejía, uno de los encargados de venderla.
“Utilizamos los mejores ingredientes frescos. Mi abuela decía que era un ‘levanta muertos’, ideal para los niños en desarrollo o para recuperarse de una enfermedad. Es una sopa poderosa”, comenta Mejía.
Más que un plato, los comensales la describen como una experiencia que revitaliza el cuerpo y el espíritu. El secreto, aseguran, está en la cocción lenta, las hierbas aromáticas y los ingredientes que le dan su fama: las criadillas y el miembro viril del toro, traídos especialmente desde Guatemala.
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Yamileth Miranda, una de las cocineras, detalla que la preparación requiere dedicación y técnica.
“Primero se asan los tomates con las demás verduras, luego se procesan para preparar el caldo. Es un proceso cuidadoso que garantiza un sabor intenso.”
Video/TCS.
El resultado es una sopa espesa, concentrada y llena de carácter, que despierta la curiosidad de muchos. Algunos llegan atraídos por su reputación, otros en busca de energía, vigor o valentía, pero todos coinciden en algo:
“Su sabor es delicioso. Se siente que todo es fresco, del momento”, afirma una clienta.
Aquí no hay cámaras ni trucos, solo fuego, sabor y valor. Porque en este lugar, el coraje se sirve en plato hondo y se saborea hasta el alma.









