Cinco personas murieron y varias más resultaron heridas después de que un autobús turístico que transportaba a 52 pasajeros de regreso a la ciudad de Nueva York desde las Cataratas del Niágara volcara y se estrellara en una zanja en la autopista. Los pasajeros tenían edades entre 1 y 74 años y no hubo niños fallecidos, informó la policía estatal.
El accidente ocurrió poco después de las 12:20 p.m. a lo largo de la Interestatal 90 en dirección este, cerca de la ciudad de Pembroke, al este de Buffalo, Nueva York, y aproximadamente a 64 kilómetros al este de las Cataratas del Niágara, según el portavoz de la Policía Estatal.
Más datos del accidente del autobús turístico
En los primeros reportes de las investigaciones se presume que la mayoría de los pasajeros no llevaba cinturón de seguridad, ya que varias personas también salieron expulsadas del autobús.
Además, la Policía Estatal detalló que se ha descartado que el percance ocurriera por una falla mecánica, incapacidad o intoxicación del conductor. Pero una de las hipótesis que se maneja es que el conductor “se distrajo, perdió el control, corrigió en exceso y terminó en el arcén derecho”, dijeron las autoridades.
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Al menos 30 personas fueron trasladadas a dos hospitales regionales con lesiones que van desde críticas a leves, incluyendo traumatismos craneales, lesiones internas y fracturas, mientras que otras fueron consideradas médicamente estables.
El Consulado General de Filipinas en Nueva York emitió un comunicado en el que afirmaba que está “siguiendo de cerca los acontecimientos” y que prestará asistencia a cualquier ciudadano filipino afectado. El consulado instó a los familiares de las posibles víctimas a ponerse en contacto con ellos.
Por su parte, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, describió el accidente como “trágico”.
