El Espanyol se impuso al Atlético tras remontar el golazo de Julián Álvarez en una gran y sufrida segunda parte donde los cambios de Manolo fueron claves, pues Miguel Rubio y Pere Milla ataron la remontada, certificando el importante y valioso triunfo.
Julián Álvarez firmó un gol de bandera para deshacer las tablas. De falta directa la Araña hizo un golazo que se coló por toda la escuadra, imparable para poner por delante al Atlético (37’).
A este Espanyol, aunque esté siendo sometido, no se le puede dar nunca por muerto y eso que el Atleti estaba siendo superior.
Remontada al Atlético de Madrid
Pero en el 72’ cayó el empate. Edu Expósito puso un centro y Miguel Rubio, que llevaba muy pocos minutos sobre el verde, entró con todo para rematar al fondo de la red y firmar el 1-1.
Un Espanyol revitalizado con los cambios providenciales, pues le salieron cara a Manolo todos los retoques del segundo acto.
Y es que si Miguel Rubio había firmado el empate a los pocos minutos de entrar, Pere Milla, otro de los cambios, hizo uno de los goles de su vida para poner en ventaja a un Espanyol que le daba la vuelta al marcador.
En el 84’ un buen centro desde la derecha lo peinó de cabeza Milla, un señor testarazo para batir a Oblak y consumar la remontada.
Brutal la reacción de los pericos en una segunda parte de locura pues muy pocos en la grada creían en la gesta viendo como el Atlético sometía a los de Manolo.
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