El caso de Jeffrey Epstein es una piedra en el zapato para el presidente Donald Trump. Le molestan las recurrentes preguntas de periodistas y rumores sobre este tema, que sigue creciendo en Washington. Y opaca los aspectos que le interesa resaltar al jefe de estado, que ha buscado, sin éxito, distanciarse del espinoso asunto.

Jeffrey Epstein, un magnate y agresor sexual de menores de edad, fue encontrado muerto el 10 de agosto de 2019 en su celda del Centro Correccional Metropolitano de Manhattan, Nueva York. Esperaba ser juzgado por cargos federales de tráfico sexual de menores.
Las autoridades determinaron que se suicidó, pero el caso ha fascinado a los teóricos de la conspiración, incluidos muchos seguidores de Trump.
Trump y Epstein fueron amigos
Y es que Epstein y Trump se relacionaron públicamente como amigos durante años, hasta que tuvieran un desencuentro en 2004. Registros judiciales muestran que Trump estuvo entre aquellos que viajaron en el jet privado de Epstein, que fue un prominente financiero.

Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, dijo que Trump prohibió a Epstein la entrada a su club de Mar-a-Lago en Florida “por ser un asqueroso”.
Trump apunta hacia Clinton y Obama
Trump considera que deberían hablar de otros cercanos a Epstein. “Deberían centrarse en el hecho de que Larry Summers de (la universidad de) Harvard y Bill Clinton, a quien conoce muy bien, y a otros muchos amigos (de Epstein) deberían hablar de ellos ¿Por qué no hablan de ellos? Hablan de mí y yo no tengo nada que ver con ese tipo” insiste Trump ante este caso que se ha convertido en un dolor de cabeza para su gobierno.
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Y lanzó un contraataque hacia el expresidente demócrata, que gobernó de 1993 a 2001. “Ustedes deberían estar hablando de Bill Clinton. Él fue a la isla 28 veces. Yo nunca fui”, asegura Trump. Se refiere a Little Saint James, una pequeña isla privada en las Islas Vírgenes. Se le conocía como Isla Epstein y se sospecha que era la base de operaciones para el tráfico sexual de mujeres menores de edad del millonario fallecido.

El presidente Trump conversó con periodistas este viernes, antes de partir de Estados Unidos hacia Escocia. Asegura que los medios no deberían «distraer» la atención pública ni «ocultar» los éxitos que ha tenido en sus primero seis meses de mandato. “Deberían centrarse realmente en lo bien que va el país, o debería centrarse en el hecho de que Barack Hussein Obama dio un golpe de estado”, disparó Trump contra otro expresidente demócrata.

Obama envió un comunicado para responder a las acusaciones de Trump. «Estas extrañas afirmaciones son ridículas y un débil intento de desviar la atención», afirmó el expresidente de 2009 a 2017.
Caso Epstein es una estafa, según Trump
Trump indicó que, a medida que se revelen los detalles, «verán que se trata de otra estafa demócrata». Además, espera que los archivos del gran jurado sobre el caso del fallecido magnate financiero «pongan fin a este engaño». «Todo el mundo debería ver lo que hay allí, pero no se debe perjudicar a las personas inocentes», concluyó.
Al inicio de su segundo mandato, Trump prometió desclasificar documentos clave del proceso Epstein, pero las primeras difusiones solo incluyeron información ya conocida públicamente. Desde entonces, no cesan las voces que piden la publicación de todos los archivos del caso.
Las decepcionantes revelaciones
El Departamento de Justicia publicó en julio un memorando sin firma en el que informaba a los seguidores de Trump de que su análisis de los archivos “no reveló ninguna ‘lista de clientes’ incriminatoria”.
“Tampoco se encontraron pruebas creíbles de que Epstein chantajeara a personas prominentes como parte de sus acciones”, señalaba el memorando. “No descubrimos pruebas que pudieran fundamentar una investigación contra terceros no acusados”. La reacción fue decepcionante y Trump quedó en una posición política complicada. Entonces, comenzó a arremeter contra sus propios partidarios, tachándolos de “débiles” por seguir hablando del caso y acusándolos de estar cayendo en una “estafa” perpetrada por los demócratas.
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