El presidente de Estados Unidos, Donald Trump anunció un nuevo arancel del 50% a las importaciones de cobre. Además, el mandatario adelantó que contempla “una tarifa muy alta del 200% a las importaciones farmacéuticas”.
“Hoy nos centraremos en el cobre”, declaró, sin precisar cuándo entraría en vigor. Sin embargo, su secretario de Comercio, Howard Lutnick dijo que el recargo al cobre podría imponerse rápidamente, “para finales de julio, quizás el 1 de agosto”.
Asimismo, Lutnick dijo que con esto “la idea es traer el cobre a casa, traer la producción de cobre a casa, traer la capacidad de producir cobre, que es clave para el sector industrial, de regreso a Estados Unidos”. El país norteamericano importa la mitad de sus necesidades de cobre cada año y solo posee con tres fundiciones de cobre.
Esta situación impulsó a los inversores a comprar el metal, lo que disparó los precios del cobre a un nuevo récord, por encima de los 5.50 dólares la libra.
Además, Trump afirmó que Washington pronto hará un anuncio sobre los productos farmacéuticos. “Van a tener aranceles muy altos, de alrededor del 200%”, dijo. Trump advirtió que si las compañías no reubicaban parte de su producción dentro de Estados Unidos en un plazo de 12 a 18 meses, para fortalecer la soberanía sanitaria y manufacturera nacional, aplicaría los aranceles.
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Por su parte, el secretario del Tesoro, Scott Bessent añadió que en total los aranceles pueden generar más de 300,000 millones de dólares para finales de año.
La administración de Trump prometió una oleada de acuerdos con sus socios comerciales para evitar las subidas arancelarias.
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