La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, anunció que la administración decidirá qué periodistas tienen acceso a los eventos del presidente Donald Trump. La decisión le quitaría el poder a una asociación independiente de medios de comunicación que lo ha hecho durante décadas. «Un grupo selecto de periodistas con sede en Washington ya no debería tener el monopolio del privilegio de acceso de la prensa a la Casa Blanca«, expresó.
Esta medida se da en medio de una batalla legal con una agencia de noticias a la que la Casa Blanca ha excluido de eventos. Por ejemplo, a los espacios como la Oficina Oval y el Air Force One en una disputa por el nombre del Golfo de México.
Además, Leavitt mencionó que la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca (WHCA, por sus siglas en inglés) había «dictado durante mucho tiempo» qué periodistas estaban en el llamado «pool«, el pequeño grupo de periodistas a los que se les daba acceso a «espacios íntimos«.
«Ya no. Estoy orgullosa de anunciar que vamos a devolver el poder a las personas que leen sus periódicos, que ven sus programas de televisión y que escuchan sus estaciones de radio«. Agregando que: «De ahora en adelante, el pool de prensa de la Casa Blanca será determinado por el equipo de prensa de la Casa Blanca«.
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Mientras tanto, Leavitt destacó que los «medios tradicionales» seguirían con acceso al grupo de prensa. Sin embargo, también estaría abierto a «medios merecedores a quienes nunca se les permitió compartir esta tremenda responsabilidad«.
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